Por Jesus Mesa
Jean Michel y Yannik no lo han tenido fácil, pero su insistencia y tesón les ha permitido cumplir con todos los tramos de pistas de Santana Trophy 2017. Este par de amigos ha terminado con el motor prácticamente descolgado y se ha visto obligado a tomar rumbo a Zagora cuando ya estaba a las puertas de Ouarzazate.
Nos hemos perdido su compañía en la fiesta de clausura en Marrakech, lo cual nos entristece. Pero sabemos perfectamente que su buena actitud ante lo bueno y lo malo no dejará que este final manche una experiencia única por los rincones más escondidos de Marruecos.
Como viejos lobos de mar, nada impedirá que retomen su rumbo a la aventura.
Fotos: Jota Alemán
![](https://4.bp.blogspot.com/-0yvyrKzkxG4/WWM5mG-gl8I/AAAAAAAA8DQ/vaROSTbIKlEOg1kRPtCR6NidQ9XEsjrOgCLcBGAs/s400/17814336_1037294039704121_5886294034667357392_o.jpg)
Jean Michel y Yannik no lo han tenido fácil, pero su insistencia y tesón les ha permitido cumplir con todos los tramos de pistas de Santana Trophy 2017. Este par de amigos ha terminado con el motor prácticamente descolgado y se ha visto obligado a tomar rumbo a Zagora cuando ya estaba a las puertas de Ouarzazate.
Nos hemos perdido su compañía en la fiesta de clausura en Marrakech, lo cual nos entristece. Pero sabemos perfectamente que su buena actitud ante lo bueno y lo malo no dejará que este final manche una experiencia única por los rincones más escondidos de Marruecos.
Como viejos lobos de mar, nada impedirá que retomen su rumbo a la aventura.
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