Tras la noche de acampada, el orden del día se pone en marcha bien temprano. El descanso de cada uno rara vez es el esperado. Un desayuno tranquilo, un café y otra vez listos para afrontar la vuelta a la ruta y a una nueva etapa.
Hoy se encaminan definitivamente hacia el sur de Marruecos,por un enlace de carretera a través del Oued Ziz. Una lección de geografía en imágenes los sumergía paulatinamente en los irreductibles paisajes desérticos. La arena aparecía cada vez con mayor frecuencia y cantidad. La temperatura, aumenta con cada kilómetro recorrido, y el sol, al que hay que tener muy en cuenta, escalaba alto en las sucesivas horas del día.
El recorrido por las pistas previstas, supone los primeros retos importantes en lo que a la navegación en #LaGranAventura se refiere. Encontrar las balizas, ubicadas estratégicamente por la organización no ha sido una tarea sencilla que todos los participantes hayan conseguido. Lo que esboza una temprana clasificación.
Una segunda prueba de cooperación internaba a los equipos en las inmediaciones del Erg Chebbi. En sus interminables ríos de arena. Unidos, el grupo atacaba dividido en dos, uno de los ríos de espesa arena que se extiende 15 kilómetros. Aunque el tramo es comedido, las monturas de los aventureros tienen una media de 40 años, conservar mecánicas y llevar cuidado cuando la temperatura sube es más que aconsejable. Ambos grupos erraban en distintas partes de uno de los tramos del día.
La Organización tenía en cuenta “el intenso sol del desierto que ha caído hoy sobre ellos”. Cabezas y cuerpos sufren hoy más desgaste del que se ve. Aun así, la travesía de hoy refleja en quien más y quien menos la satisfacción de verse rodeado por la arena. Más de uno se sorprendía de lo bien que van estos incombustibles clásicos sobre ella.
A la mitad de la prueba de arena, Román, con su 88 –dorsal #25-, salía de su coche con cara de satisfacción: “Acabamos de ayudar a sacar a un compañero que se ha quedado atascado y lo estamos pasando genial. La verdad es que ahora mismo la competición es lo de menos. Ya tenía muchas ganas de navegar por la arena.”
Con las pruebas en los ríos de arena ya cerradas, el descanso y la recuperación en la Kasbah‘Le Touareg’ cerraba el día en un emplazamiento difícil de superar: El pequeño desierto encapsulado de Merzouga, el Erg Chebbi. Irreductible, muestra la ‘Gran Duna’ en todo su esplendor mientras entra literalmente hasta el hospedaje.
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Stage Three.
Amersid – Errachidia – Merzouga. Rivers of Sand.
Today is the day they finally get to the south of Morocco, driving on a road that takes them through the OuedZiz. A visual lesson in geography that shows them, once again, the variety of the Moroccan landscapes. Large quantities of sand start appearing more frequently, the temperature rises with every kilometre, and the sun, which everyone eyes with care, keeps rising as the day wore on.
The route through the chosen tracks brings the first real navigational tests to #TheGreatAdventure. Finding the marks, strategically placed by the Organization, hasn’t been an easy feat for all the participants, and the first traces of the classification begin to take place.
The second cooperation test takes the teams close to the Erg Chebbi, where its sand rivers await them. United, the participants face the sand in its almost liquid stage for 15 km, divided in two groups. Even through the track is not too difficult, the machines are around 40 years old, so maintaining them in a good state and keeping an eye on the temperature is a must. Each team makes their own errors in different parts of the path.
The Organization keeps in mind “the intense sun that fell on them during the whole day”. Minds and bodies are more tired than they seem. Even so, most are very happy with being surrounded by sand, and certainly surprised at how well these classic vehicles behave on sand.
Halfway through the sandy part of the stage.RomainRollet, #25 and driving an 88, exited his car with a grin of satisfaction on his face: “We just helped another participant who had gotten stuck in the sand, and we’re having a great time. Right now, competition is hardly the most important thing. I was really excited to drive on sand again.”
With the sand stages behind them, rest and relaxation awaits them at Kasbah ‘Le Touareg’, a great ending for a great day, and set in an idyllic location: the small desert of Merzouga, in the Erg Chebbi. It proudly showcases its Great Dune, while accompanying them literally to the door of tonight’s accommodations.